El concepto de transformación digital y todas las posibilidades que ofrece suponen un cambio en la relación del ciudadano con el transporte público. El aprovechamiento de las mismas para mejorar la experiencia del cliente, proporcionar una experiencia más personalizada y con menos fricción, además de lograr su preferencia en un entorno de mayor número de opciones es el reto de los operadores y los diferentes participantes en el transporte público.